¿Cómo se presenta el gasto energético en una persona sedentaria, una deportiva y una actividad laborando profesionalmente?

¿Cómo se presenta el gasto energético en una persona sedentaria, una deportiva y una actividad laborando profesionalmente?

La ingestión de energía suministrada por los alimentos no debe superar al gasto energético que tiene el individuo. Cuanta menos activa sea una persona menos aporte energético necesitaría y en consecuencia mayor a de seer el contenido de nutrientes esenciales por unidad de energía.

Persona sedentaria que ingiera una dieta de 1800 Kcal. Tendrá que proporcionar los mismos nutrientes que una persona deportista que ingiera 3500 calorías. Con esto se quiere reflejar que la persona que realiza un mayor grado de actividad físico deportiva, al ingerir mas alimentos para compensar el mayor gasto energético que realiza, tiene menos posibilidades de padecer déficit alimenticio, siempre y cuando su dieta sea variada y equilibrada.

En general la dieta de una persona físicamente activa debe ser:

Rica en hidratos de carbono

Rica en proteínas

Adecuadamente en lípidos

Suficiente en vitaminas, minerales y agua.

Por lo tanto las cantidades de proteína suficientes para satisfacer las demandas ordinarias del cuerpo deberán incrementarse solo en una proporción muy modesta durante los periodos de aumento de la actividad física.

Los hidratos de carbono son el principio inmediato que supone la mayor parte de la ingesta alimenticia de la persona, independientemente de su edad, y si es sedentaria o activa.

 La mayor parte del excedente energético ingerido, sea del tipo que sea, termina transformándose en grasas de depósito. Este proceso se produce tanto si en  el excedente de alimentos proviene de hidratos de carbono, como si proviene de las propias grasas. El aporte de grasas insaturadas, generalmente vegetales, sobre las saturadas generalmente animales.

Los minerales que tienen un papel mas importante en el desarrollo de la actividad física son el calcio (Ca), sodio (Na), potasio (K), cloro (Cl), magnesio (Mg), fosforo (p), azufre(s), yodo (i), hierro (fe), y zinc (Zn). Todos ellos se aportan de una manera adecuada si se realiza una dieta equilibrada desde los puntos de vista cuantitativo y cualitativo, por lo que el aporte suplementario no es necesario, la ingesta indiscriminada de compuestos ricos en minerales nunca ocasionara un aumento del rendimiento deportivo, presentando por el contrario efectos negativos relacionados fundamentalmente. La importancia de las vitaminas en el rendimiento físico-deportivo se centra en las vitaminas hidrosolubles.

Se ha demostrado que se puede producir disminución de rendimiento físico por falta de vitamina B1 y c.